Page 128 - Investigando nuestra propia práctica; una estrategia de formación y conocimiento

Ha implicado la ruptura de la red familiar y social, en el caso de 119
Ciudad Juárez se vive por partida doble; ya que, por una parte, las
familias se ven fragmentadas al cambiar su lugar de residencia (uno
o varios de sus miembros); y por la otra, la estructura y los roles fa-
miliares se ven trastocados, pues en esta ciudad durante varias dé-
cadas el empleo de la industria maquiladora fue ofrecido casi exclu-
sivamente a mujeres jóvenes. El crecimiento de la “maquila” ofreció
solo la infraestructura social mínima para enfrentar los problemas,
hecho que presentó implicaciones en la calidad de atención a los
niños y adolescentes (Almada, 2008).

Para Servín (2004) las ciudades se dinamizaron con la inversión extrajera, impulsando el
desarrollo urbanístico, de infraestructura y comercio. Acentuando los flujos migratorios de
estados del sur de la República mexicana; incrementando la población flotante que requiere
vivienda digna, servicios públicos e inclusión social y de orígenes diversos con desarraigo en
la ciudad, interesada en cruzar la frontera y carentes de recursos económicos aumentando
las filas de comerciantes informales, o desempleados propiciando un clima de inseguridad,
violencia y deterioro en la ciudad. (Servín, 2004).

Por otro lado, la CEPAL (2008) afirma:

Muchos jóvenes enfrentan situaciones de exclusión, entre ellos el Investigando nuestra propia práctica; una estrategia de formación y conocimiento
económico, social, político y cultural. Pese a la mayor prosperidad
económica, la pobreza continúa afectando a gran parte de la po-
blación joven y persisten elevados niveles de inequidad, esta ex-
clusión social que sufre cotidianamente el joven desempleado en un
contexto de propuestas masivas de consumo da cuenta de una di-
mensión estructural de violencia que afecta a los jóvenes en el plano
económico (CEPAL, 2008).

“Parece haber cierto consenso en que el joven devuelve como violencia social lo que recibe
como violencia estructural” (De Roux, 1994, p.27).

“Los jóvenes saben que no tendrán acceso a un oficio o profesión valorada y menos aún a
una buena remuneración. Su consiguiente falta de apego a las instituciones incrementa la
sensación de estar fuera” (Briceño-León y Zubillaga, 2002, p.19).