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PARtIcIPAcIóN DE lA INFEccIóN POR El VPH EN lA INFERtIlIDAD

El VPH es el agente infeccioso de transmisión sexual más común en mujeres y hombres (Wang
et al., 2010; Weidner et al., 1999). Y si bien es cierto que el papel de este virus en el desarro-
llo del cáncer cervicouterino en mujeres está ampliamente investigado, incluso en la evasión
de la respuesta inmunitaria, el estudio de la infección causada por el VPH en los hombres es
escasamente conocido, aún más en hombres infértiles. Esto se debe en parte a que la infec-
ción es asintomática y, por tanto, los hombres no suelen ser revisados de forma rutinaria para
la detección de este agente, lo que resulta en un posible reservorio de infección con un alto
riesgo de transmisión a la pareja, así como en algunas repercusiones en la salud del hombre,
entre ellas la infertilidad (Lyu et al., 2017; Xiong et al., 2018).

Ahora bien, el VPH pertenece a la familia Papillomaviridae y al género Papillomavirus. Se trata
de un virus que presenta un genoma de ácido desoxirribonucleico (ADN) circular de doble
cadena con 7900 pares de bases y que se encuentra asociado con histonas que forman un
complejo similar a la cromatina. Además, no posee envoltura y presenta una cápside icosaé-
drica que está compuesta por 72 capsómeros. Asimismo, este genoma presenta un promedio
de ocho marcos de lectura abierta (ORF) importantes que son expresados a través de ácidos
ribonucleicos mensajeros (ARNm) policistrónicos, transcritos de una sola cadena de ADN. Di-
cho material genético se divide en tres regiones principales: 1) una región de control (LCR, long
control region); 2) una región temprana (E, early), que da origen a proteínas no estructurales, y
3) una región tardía (L, late), que contiene los genes que dan origen a dos proteínas estructura-
les. La región LCR contiene un centro promotor llamado p97 (en VPH-16) o p105 (en VPH-18)
que permite potenciar o silenciar secuencias que regulan la replicación del ADN mediante el
control de la transcripción de los ORF; esta región contiene la mayor variación genética entre
un tipo viral y otro. Las proteínas E1 y E2, transcritas a partir de la región temprana, son res-
ponsables de la replicación viral y expresión génica. La región tardía codifica para las proteínas
L1 y L2 componentes de la cápside viral de 95 % y 5 %, respectivamente. Las proteínas E6 y
E7, productos de la región temprana, son las encargadas de inmortalizar la célula hospedera
y del proceso carcinogénico (Silva et al., 2013).

En cuanto a la prevalencia del VPH, parece ser menor en hombres que en mujeres (Giuliano
La investigación en instituciones de educación superior en México
et al., 2011). Además, en el caso de aquellos, los reportes de prevalencia del virus en mues-
tras de semen ofrecen datos muy variables que van desde 2 % en semen de hombres fértiles
hasta 85 % en semen de pacientes que se atienden en clínicas de fertilidad (Damke et al.,
2017; Flores et al., 2010; Foresta et al., 2015; Garolla et al., 2012; Garolla et al., 2015; Golob
et al., 2014; Green et al.,1991; Nasseri et al., 2015; Schillaci et al., 2013). Y particularmente
en México se han reportado prevalencias de 27 % y 59 % en hombres que se encuentran en
programas de reproducción asistida (Cortés et. al., 2017; Flores et al., 2010).

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