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ESTRATEGIAS ORGANIZACIONALES E INNOVACIÓN TECNOLÓGICA
concupiscencia. En el ánimo de la conveniencia y la comodidad, y sin reparar en todos los
costos de diversa índole asociados a ello, el ser humano se ha dejado seducir por la ilusión del
mercado y se ha convertido en un fetichista de la mercancía.
Se requiere, por tanto, un cambio urgente para detener nuestra marcha hacia el olvido y para
transformar el paradigma desarrollista por uno en el cual podamos vivir dentro de los límites.
La crisis, en toda su gravedad, no anula la posibilidad de salvación, sino que presupone la
oportunidad del cambio redentor, aunque antes tenemos que transformarnos para transformar.
Estamos frente a la inusitada oportunidad de socializar la producción por la vía del ejercicio
de nuestra responsabilidad social individual, lo que nos permitiría redireccionar el quehacer
empresarial hacia la producción sustentable. Por tal motivo, debe ser la demanda (reflexiva
y racional), y no el consumo, la que determine lo que ha de producirse, y para eso debemos
modificar la tasa de recambio de los bienes producidos, aunque eso solo sucederá si una
proporción importante de la población mundial se adhiere a estos principios básicos. Hasta
el momento los esfuerzos que intentan realizar las organizaciones empresariales y la sociedad
civil organizada para cambiar este panorama son insuficientes ante el tamaño de las amenazas.
Por último, se ha tratado de esbozar el impacto de las TIC para la sustentabilidad del desarrollo
futuro de las sociedades humanas. Por una parte, se ha señalado que los efectos de primer
orden de las TIC han agravado ciertos problemas, pues su uso y producción han acelerado la
expoliación de recursos escasos y han promovido la explotación de millones de personas que
viven en pobreza extrema en los países de donde se extraen las materias primas esenciales
para su desarrollo. De hecho, el consumo energético de las TIC ha contribuido a aumentar los
niveles de emanaciones de gases de efecto invernadero.
Sin embargo, las TIC también pueden colaborar para revertir este escenario, debido a los
efectos de segundo orden, los cuales consisten en la acción desmaterializadora de muchas de
las actividades que se realizan a nivel de producción y de servicios tanto en las organizaciones
empresariales privadas como en las instituciones de gobierno. Para precisar esto, no obstante,
aún faltan estudios de gran envergadura para precisar cuáles son los verdaderos problemas y
beneficios de las TIC.
Finalmente, si bien es cierto que en estas páginas se han planteado más inquietudes que
certezas, también lo es que nadie se puede invocar a la ignorancia para intentar esconder las
responsabilidades que tiene en esta materia, pues hoy se sabe que el comportamiento indivi-
dual puede impactar a favor o en contra de la solución o el deterioro de los problemas, y ni la
Divinidad podría excusarnos de no haber hecho lo que teníamos que hacer como individuos.
REFERENCIAS
Anzorena, O. (4 de abril de 2011). 8 dimensiones en la evolución de la gestión de empresas.
Recuperado de https://www.gestiopolis.com/8-dimensiones-en-la-evolucion-de-la-ges-
tion-de-empresas/.
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