Page 118 - LA INVESTIGACIÓN: CUANDO PARA RESOLVER UN PROBLEMA, ANTES HAY QUE CREARLO
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Jerez, Rioseco, Valdivia, Vicente y Vielma (1996), por su parte, encontraron que 17 % de los estu-
               diantes de odontología y 44 % de los alumnos de medicina presentaban sintomatología ansioso-de-
               presiva, mientras que en la Universidad Católica San Antonio de Murcia (España) se determinó que
               los estudiantes del área de ciencias de la salud tenían una prevalencia de ansiedad de 53.3 % y una
               prevalencia de depresión de 61.4 %. Para completar estas ideas, en la tabla 3 se esquematiza la
               prevalencia de los índices depresivos en estudiantes de medicina.

                           Tabla 3. Prevalencia de los índices depresivos en estudiantes de medicina                La investigación: cuando para resolver un problema, antes hay que crearlo

























                                                  Fuente: Elaboración propia




               En un estudio de Balanza, Morales y Guerrero (2009) también se reportó que existe una asociación   117
               entre las exigencias académicas con el trastorno depresivo (OR: 1.741, P = 0.031), lo cual sugiere
               que las actividades académicas pueden incrementar el riesgo de padecer un trastorno depresivo.
               Notablemente, Balanza, Morales, Guerrero y Conesa (2008) encontraron una fuerte asociación entre
               el estrés académico, la ansiedad y la depresión en estudiantes universitarios, lo cual se evidenció
               en una correlación de 0.602 y una P < 0.001 entre la ansiedad y la depresión presentada por los
               estudiantes; esto indica que a mayor nivel de ansiedad mayor probabilidad de que se presente la
               sintomatología depresiva. En ese estudio, de hecho, se registró una asociación moderada entre las
               demandas académicas universitarias con la ansiedad (0.339, P < 0.001) y con la depresión (0.387, P
               < 0.001), lo que sugiere que las tres variables se encuentran asociadas.

               Finalmente, algunos autores han señalado una asociación entre los síntomas depresivos con la
               deserción escolar, el bajo rendimiento académico, el impacto en las capacidades de atención, la
               ideación suicida y el suicidio (Foltyn, Nowskowska, Knopik y Brodziak, 1998; Givens y Tjia, 1986;
               Nogueira, Neto y Macedo, 2004; Zoccolillo, Murphy y Wetzel, 1986). Por ello, resulta esencial que en
               los diferentes programas académicos se realice una identificación temprana de los estudiantes que
               se encuentran en riesgo debido al estrés y a las demandas académicas, pues de esta manera se
               puede contribuir a aumentar el rendimiento escolar y la salud física y emocional.
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