Page 70 - LA INVESTIGACIÓN: CUANDO PARA RESOLVER UN PROBLEMA, ANTES HAY QUE CREARLO
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capacidad y la voluntad de las personas para disfrutar de los derechos y cumplir con las obligaciones
que supone la condición ciudadana. En este sentido, la Ley de Cultura Cívica del Distrito Federal
publicada en mayo de 2004, ya con algunas reformas a la fecha, garantiza la convivencia de los ha-
bitantes, la participación vecinal y el acercamiento a los deberes cívicos de los mexicanos.
Asimismo, el Instituto Nacional de Estadística y Geografía (Inegi), en conjunto con la Secretaría de
Gobernación (SEGOB), realizaron la Encuesta Nacional Sobre Cultura Política y Prácticas Ciudada-
nas (ENCUP, 2012) con una muestra de 5056 viviendas a nivel nacional, para lo cual se seleccionaron
a los miembros de dicha unidad habitacional que tuvieran más de 18 años de edad. El cuestionario
aplicado se dividió en 9 capítulos y permitió conocer que para 49 % de los encuestados la política La investigación: cuando para resolver un problema, antes hay que crearlo
era sumamente complicada.
En cuanto al cuestionamiento sobre si los problemas de la sociedad debían ser resueltos por el Go-
bierno, 51 % estaba de acuerdo, aunque 65 % se encontraba poco interesado en la política, mien-
tras que 21 % no revisaba medios impresos ni televisivos para enterarse de dichos temas. Asimismo,
33 % consideró que sentía que vivía en democracia, aunque también se destaca que 50 % prefirió
el desarrollo económico en lugar de la democracia. En otras palabras, 20 % opinó que preferiría vivir
en una dictadura que no respetara los derechos humanos siempre y cuando asegurara el avance
económico. De hecho, 28 % pronosticó que la democracia futura será peor en México e incluso 51 %
dijo que permitía la corrupción.
En una escala de 0 a 10, sobresale que 7.8 confiaba más en su familia, mientras que 4.3 lo hacía en
la policía. Incluso, 69 % confiaba más en las otras personas que en el Gobierno. Sobre la erradica-
ción de la corrupción, 38 % expresó que existía esa posibilidad, mientras que 37 % dijo que eso era
poco posible. En otras palabras, para 73 % de los encuestados el Gobierno mexicano no cumple 69
con la ley.
Por otra parte, para 35 % resulta difícil trabajar con otro mexicano por causas en común, aunque
para un porcentaje similar (34 %) esa relación es fácil. También se destaca que 96 % de los encues-
tados dijeron que sí contaban con la credencial para votar, aunque cabe acotar que este documento
únicamente tiene una finalidad electoral; aun así, 71 % lo tramitó solo para identificarse, 20 % para su
finalidad objetiva y 8 % para ambas cosas.
En cuanto al sentimiento de patriotismo, 75 % expresó su orgulloso por ser mexicano. Esta cifra, sin
bien es considerable, representa un retroceso cuando se compara con los datos recabados en la
encuesta aplicada en 2008, pues en esa fecha el orgullo mexicano se ubicó en 81 %. Esta disminu-
ción se podría explicar debido a tres aspectos importantes: el avance de la corrupción en México, el
rechazo de la sociedad y su desconfianza por el Gobierno y el desconocimiento del quehacer político
y la falta de cultura cívica.
Tomando en cuenta todo lo anterior, se puede concluir que la cultura de la legalidad se centra en el
valor moral, ético y voluntario por respetar las leyes o normas jurídicas. En cambio, en cuanto a la
cultura jurídica, se puede decir que este concepto surge también en el siglo XX, cuando Friedman lo
define como una interpretación del derecho y sus instituciones.