Page 74 - La enseñanza de las matemáticas, un reto para los docentes en formación

De la misma manera, la escuela trabaja mucho ese aspecto debido al tiempo completo, lo cual
influyó mucho, después del horario normal de clases los alumnos dan repaso a todo lo que se les
dificulta, en este aspecto, juegan con la matemáticas, un punto favorable que me ayudó a trabajar
con todos, sin excepción alguna, claro, después de haber enseñado y organizado el contenido.
Concluyo con que enseñar es una de las mejores maneras de aprender pues obliga a organizar y
sistematizar las propias ideas.

itzel muñoz

En los últimos años, el ejercicio docente, se ha denigrado. Ya que las condiciones en las que se
desarrolla la actividad, se trasformaron en poco legibles y con una gran falta de profesionalización
derivada en distintas arista. En el siguiente trabajo se desarrollará un análisis basado en las ex-
periencias docentes adquiridas durante las jornadas de práctica docente en las escuelas secun-
darias, en la modalidad de telesecundarias. Abriendo así líneas, para la comprensión del ejercicio
docente y el impacto que tiene en los aprendizajes de los alumnos, tomando como referente la
enseñanza de las matemáticas.

Profesor, palabra que a decir en el diccionario de la Real Academia Española es; “M. y F. Persona
que ejerce o enseña una ciencia o arte”. Partiendo de esta premisa, el enseñar matemáticas, toma
un sentido bidimensional, donde ejercer o enseñar debe también poseer; habilidades y destrezas
que favorezcan la didáctica de su misma enseñanza.

Muchos docentes al estar frente a grupo, caemos en una dinámica, que a decir de la práctica
paradógica, facilita nuestro quehacer docente. Con esto refiero a como nosotros de manera in-
consciente recurrimos en la enseñanza tradicionalista, convirtiendo con esto a la escuela en un
lugar tedioso para los alumnos, donde el pan de cada día es: entrar al aula y quedarte sentado
escuchando al profesor, copiando lo que escribe en el pizarrón, pasando las letras a la libreta, a
veces poco entendibles, para después repetir las mismas cosas en el examen. Convirtiendo en-
tonces al alumno en un preso, donde su palabra no es tomada en cuenta, donde egoístamente el
docente enseña lo que cree es bueno para el dicente, dejando de lado lo realmente importante,
enseñar la que necesita el alumno.

La enseñanzas de las matemáticas, no es algo fácil, y como ya mencioné en el párrafo anterior,
necesita de muchos esfuerzos de los cuales, uno como docente, no siempre está dispuesto a
hacer, recayendo entonces a los modelos tradicionalistas de enseñanza. El quehacer docente
implica una constante actualización, un dominio precisó de los contenidos y prácticamente ser un
todólogo.

La vocación es la parte de medular de este ejercicio. Ya que al el hacer lo que realmente le gusta le
facilita el adquirir nuevos conocimientos que mejoran el estilo de enseñanza. Adquirir la confianza
en uno mismo, retomando lo bueno del entorno, facilita el camino de la preparación y constante
actualización.

66