Page 77 - La enseñanza de las matemáticas, un reto para los docentes en formación

Al indagar sobre la principal problemática que amenazaba a la escuela tal fue la sorpresa de que el
pensamiento lógico matemático y la comprensión lectora eran el punto débil de las aulas, y los mo-
tivos por el cual causaba esta carencia era que los estudiantes que radicaban ahí son mayormente
de padres campesinos que faltan continuamente a clases por ayudar en las labores domésticas
o trabajo prematuro. Precisamente estas causas daban como consecuencia el rezago educativo,
deserción escolar y bajo rendimiento en los salones de clases, obteniendo discentes somnolientos
y desgastados por el trabajo físico.

Afortunadamente el docente titular comprometido con su profesión realizaba metodologías dife-
rentes incentivando al alumno a realizar los ejercicios y despertar el interés por aprender nuevos
conocimientos. En una ocasión el educador observando que sus alumnos no daban el rendimien-
to adecuado preparo una dinámica en el exterior para conocer y obtener las áreas de superficies
cúbicas, así como sus perímetros de estas, utilizando como material las diferentes figuras que
estuvieran en toda la escuela (salones, canchas, tableros, mesas, postes, entre otros). Cabe decir
que esta dinámica impartida por el titular del grupo fue aplicada de manera exitosa obteniendo
los aprendizajes significativos que la materia exige de una manera divertida y diferente para los
educandos.

Este caso podría ser uno de tantos que ocurren en las escuelas, pero ¿Se enseñan las matemáti-
cas de una forma diferente en otras escuelas? ¿Las aprenden mejor nuestros alumnos y alumnas?

El caso es que el método tradicionalista a pesar del tiempo que se tiene practicando y que se ha
venido descontinuando por las modificaciones de los mismos planes y programas de estudio por
ser anticuado y poco eficiente para combatir los problemas educativos.

Por ende comprendí que el reto del profesor es hacer de esos “zombis” que van por los pasillos de
la escuela, sin ganas de entrar al aula porque repetirán la misma sistematización que se ha venido
inculcando desde tiempos atrás como el de observar el pizarrón, anotar en la libreta y prepararse
para la prueba, haciendo de esto algo cotidiano y tedioso para el adolescente.

Esto es algo similar a lo que pasa en la enseñanza de las matemáticas de escuelas telesecundarias
que adoptan el modelo pedagógico tradicionalista dejando a lado las actualizaciones que permiten
encontrar las necesidades de los estudiantes.

Otro caso particular que logre rescatar durante mis prácticas docentes fue en la Capital de Chil-
pancingo de los Bravo, Gro., en una de sus colonias ligeramente marginadas. En esta ocasión
estuve a cargo de un grupo de primer grado, la infraestructura de la institución era degradante,
pues, sus instalaciones son de una casa hogar prestadas por un miembro del comité de padres de
familia. A diferencia de la escuela anteriormente mencionada que está ubicada en una comunidad
daba mejores rendimientos académicos que esta escuela siendo parte de la capital del estado.
Los maestros frente a grupo tenían escasos dominios de temas y ausencia de interés al impartir
sus clases, dejando de lado los intereses de los alumnos sin mencionar la falta de valores que
predominaba en el ambiente escolar.

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